Mucho se ha escrito acerca de este poderoso concepto y, sin embargo, mucho se sigue confundiendo a día de hoy. Sobre todo, entre un público que tiene un negocio pero que no pertenece directamente al mundo de la profesión. Una pena, ya que la mayoría están haciendo branding en su día a día y sin saberlo.
Hoy quiero explicarte de forma muy sencilla y desde mi perspectiva y humilde opinión qué es branding y por qué es tan importante si estás creando una marca activista.
Qué es branding
«El branding es la disciplina que se encarga de crear marca.» Y que además, esa marca (o emoción) que quieres dejar en la mente y el corazón de las personas, sea exactamente la que deseas.
Es decir que, por un lado, es la disciplina que te ayuda a definir quién eres, hacia dónde te diriges y qué necesitas para llegar hasta tus objetivos en un mundo de marcas, proyectos o personas que a priori podrían parecer similares.
Y por otro lado, es la disciplina que te ayuda a ser consciente de si aquello que dices que eres, es realmente lo que percibe tu público.
Cuando lo que dices que eres (identidad de marca) es igual a lo que percibe tu público (imagen de marca) significa que estás comunicando adecuadamente y por tanto, estás dejando la marca que tú quieres dejar.
En resumen, hacer branding no es ni más ni menos que cuidar de tu marca día tras día.
Es difícil saber si estás haciendo un buen trabajo, si primero no defines quién eres y a qué has venido.
Branding no es (solo) diseño
Hay una creencia muy extendida en el mundo de los negocios en la que se vincula el branding únicamente con el diseño o la identidad visual. Lo que lleva a creer que «una marca es un logotipo».
Pero decir que una marca es un logotipo o que branding es solo diseño, es como decir que una casa es una ventana. Es decir, el diseño es tan solo una pequeñíííííísima parte de todo lo que abarca la disciplina del branding.
En realidad, el branding cobra vida y se hace palpable gracias a la comunicación. Es decir que, «hacer marca» significa: «enviar un mensaje».
Este mensaje puede ser:
- "mis productos son los más innovadores del mundo",
- "soy la marca de las personas valientes",
- "he venido a cambiar el statu quo",
- ...
Y puede ser enviado a través del diseño, los colores, los materiales, las palabras, una experiencia, un tono de voz, unos ideales, una actitud…
No tener claro este pequeño matiz podría llevarte a querer contratar tan solo un logotipo, pensando que de esta forma ya tendrás creada tu marca. Sin embargo, tu marca la empezarás a crear en cuanto empieces a comunicarla y la seguirás creando hasta el fin de sus días.
Así que lo primero que debes hacer antes de contratar cualquier diseño es averiguar cuál es el mensaje de tu marca. Las marcas que no tienen esto claro, es lo que los profesionales del branding tachamos de «marcas sin alma».
Así que, no seas una marca sin alma. 😉
Por qué el mensaje de tu marca es tan importante si eres una "marca activista"
Si eres o deseas convertirte en una marca activista, hay algo que tienes que tener muy claro: tu marca, además de ofrecer productos, servicios, cursos o talleres, está actuando como una agente de cambio.
Esto significa que tu marca ha nacido para inspirar a otras personas a comportarse o vivir su vida de una determinada manera. Y por tanto, tienes un mensaje muy importante que transmitir.
Por eso, tu comunicación no puede consistir únicamente en decir que: «con mi producto o servicio voy a solucionarte la vida» o que: «con mi producto o servicio te vas a sentir de tal o cual manera».
Tu comunicación también debe transmitir que: «con mis productos o servicios estoy cambiando el mundo y, cuando compras mis productos o servicios, tú también pasas a ser parte de la solución».
Convencer a tu público de tal afirmación no es moco de pavo. Por eso es importante que tengas claro cómo vas a formular ese mensaje.
Los 3 puntos clave para comunicar el mensaje de tu marca activista:
A la hora de formular tu mensaje hay 3 puntos clave que te ayudarán a redactar un mensaje de marca que levante a cualquiera del sofá:
- Tu propósito. Aquello que deseas cambiar o conseguir y que funcionará como gancho para llamar la atención de las personas que quieren conseguir lo mismo que tú. — "O creo en tu causa y me uno a ella, o no me interesa".
- Tus valores. Aquello en lo que crees y da sentido al porqué deseas conseguir ese propósito y que te ayudarán a reforzar la confianza y la conexión con las personas que creen y quieren conseguir lo mismo que tú. — "Reconozco tus valores, me identifico con ellos y por eso siento que yo también soy parte de lo que defiendes".
- Tu personalidad. Esa forma única que tienes de liderar lo que defiendes y que te ayudará a destacar entre otras marcas activistas que defienden lo mismo que tú. — "Me gusta la forma con la que defiendes el propósito que compartimos y cómo me haces sentir en mi camino hacia la solución".
Cuando tienes claros estos 3 puntos, ya puedes pasar a escribir tu mensaje de marca. Además, puedes escribirlo en forma de manifiesto, para tener un texto o un conjunto de frases inspiradoras que podrás publicar en tu web, en tus redes sociales, cuando entregues un dossier con tus servicios o incluso compartirlo con tu audiencia para saber qué os mueve como tribu y de qué manera os gustaría conseguir ese propósito que compartís.
Nuestra motivación aumenta cuando sentimos que formamos parte de algo mucho más grande que nosotros mismos, así que no desaproveches el potencial de las palabras para transformar tu propósito en un movimiento social.
¿Quieres que te ayude a escribir tu manifiesto de marca? Pues en este artículo te cuento cómo debe ser el manifiesto de tu marca activista.
¡Hasta la próxima!